Este años ha habido un poco de todo, y el próximo 2018 tendremos también cine bueno y no tan bueno. Yo personalmente tengo las esperanzas puestas en films como "La forma del algua" de Guillermo del Toro, "El hilo invisible" de Paul Thomas Anderson, "Mute" de Duncan Jones, "Los archivos del Pentágono" de Steven Spielberg o "Isla de Perros" de Wes Anderson.
Y como decía antes, este año ha habido un poco de todo. También buen cine. Incluso muy buen cine. Mis películas más destacadas de este 2017 que se ha acabado serían las siguientes:
- "Silencio" de Martin Scorsese, por la profundidad de su discurso sobre la fé, y por haber sabido acercarse al espíritu de Mizoguchi desde una óptica occidental;
- "La La Land" de Damien Chazelle, por vibrante arranque, por su final agridulce y porque renueva la fé en que aún se pueden hacer musicales originales;
- "Personal Shopper" de Olivier Asayas, porque se aleja de cualquier tipo de convencionalismo cinematográfico;
- "Get Out" de Jordan Peele, por su mala baba y por saber combinar con acierto humor (muy negro), terror y crítica política;
- "Dunkerke" de Christopher Nolan, por su virtusismo formal y por la arrolladora potencia de su puesta en escena;
- "Madre!" de Darren Aronofsky, porque su capacidad alegorica encierra multiples lecturas y por ser una fuente inagotable de ideas y sugerencias;
- "A Gost Story" de David Lowery, por su capacidad para emocionar desde la sugerencia y por asumir riesgos formales que la apartan del cine al uso;
- "Blade Runner 2049" de Denis Villeneuve, porque partia con el prejucio de ser una secuela innecesariaa, y sin embargo ha sabido erigirse en un producto único y original, capaz de superar el peso de la mítica y estar a la altura de aquella;
- "Moonlight" de Barry Jenkins, por saber acercarse a temas tan delicados como la marginación, la discriminación o la búsqueda de la identidad sexual rehuyendo el tremendismo;
- "Train to Busan" de Shang-ho Yeon, porque es enormemente entretenida y porque encierra un soterrado discurso político cargado de vitriolo;
- "Your Name" de Makoto Shinkai, por la belleza de sus imágenes, por su sensibilidad tanto estética como argumental, y porque nunca, nunca abusa del almíbar.
¿El actor del año? Me quedaré con dos: por un lado Daniel Day-Lewis, que anuncia su enésima retirada del cine y que nunca defrauda en sus intrepretaciones, y más si es trabajando para un genio como Paul Thomas Anderson en "El hilo invisible"; y por otro lado con un auténtico animal interpretativa como Joaquin Phoeni, a quién no hay papel que se le resista, y más uno tan visceral e intenso como su Joe en "En realidad, nunca estuviste aquí", por no mencionar que el próximo año lo veremos dando vida a Jesucristo en la "Maria Magdalena" de Garth Davis.
¿El director del año? Guillermo del Toro. Primero porque su último film "La forma del agua" está cosechando alabanzas por doquier, pero sobretodo porque triunfar en Venecia y llevarse lel león de oro con un film de género fantástico no es moco de pavo.
¿El compositor del año? Daniel Hart, porque "A Gost Story" es simplemente una de las partituras más originales, bellas y conmovedoras de cuantas he escuchado este año, con perdón del inconbustible Alexandre Desplat. Con este trabajo Hart se situa en el grupo de compositores a seguir muy de cerca en el futuro.
¿El personaje del año? Wonder Woman, porque dentro de un cine de superhéroes hipertrofiado, masculinizado, y falto de originalidad, Wonder Woman no solo es una recuperación de las raíces más clásicas (y naives) del concepto de 'superhéroe', sino porque además propone una muy necesaria e inspiradora reivindicación del empoderamiento femenino en un mundo dominado por los hombres.
Y como cada año no puedo cerrar este artículo sin mencionar a algunos de personajes que, tristemente, nos han dejado este año: entre otros Harry Dean Staton, Federico Lupppi, Tobe hooper, Telele Pàvez, Sam Sheppard, George Romero, Martin Landau, Adam West, Chuck Berry, Jon Hurt o Jonnathan Demme. Pero me gustaría dedicar un recuerdo especial a tres de ellos:
Jeanne Moreau, inolvidable Catherine del "Jules et Jim" de Truffaut, Celestine en "El diario de una camarera" de Buñuel, Maria en "Viva Maria!" de Louis Malle, Doll Tearsheett en "Campanadas a medianoche" de Orson Welles o Lyssiane en el "Querelle" de Fassbinder. Uno de los rostros más enigmáticos y fascinantes del cine frances (y mundial) de todos los tiempos.
Roger Moore. Salto a la fama interpretando a Simon Templar en la serie "El Santo", pero todo el mundo lo rercadará como un de los James Bond más ocarrones de todos los tiempos, al que que aportó apostura y talante canallesco en 6 films de la saga.
Jerry Lewis. Formó mitica pareja cómica con Dean Martin en un sinfin de comedias, pero es justo reivindicarle como realizador. Dejó su muy personal impronta y su particular manera de entender el humor (entre la ternura y la ironia, a ratos benevolente pero tambien cargado de vitriolo) en nada menos que 14 films, entre los que destancan títulos como "El botones", "El terror de las chicas", "Jerry Calamidad", "Las joyas de la familia" (en donde llegaba a desdoblarse en 7 papeles diferentes) y, como no, la que para muchos es su mejor película "El profesor chiflado", originalísima y malintencionada revisitación en clave de comedia del clásico "Doctor Jeckyll y Mr. Hyde".









No hay comentarios:
Publicar un comentario