El proceso de producción de "Justice League" fué complejo y no exento de polémica. Tras "Man of Steel" y "Batman vs Supeman. Dawn of Justice", Snyder se hizo cargo de la realización del film que iba a reunir la plana mayor de superhéreoes de la DC Comics. Tras presentar a los productores un montaje preliminar inacabado de 4 horas, redujo el mismo a 2 horas y media, y más tarde se acordó con los productores que la duración final del film se aproximaría a las 2 horas. Fué entonces cuando la trajedia golpeó a la familia Snyder: el suicidio de la hija de Zack y Deborah Snyder provocó la prematura retirada del director de las labores de post-producción, no llegando a intervenir en el montaje final del mismo.
La salida de Snyder propició la entrada de Joss Whedon, quien terminó la película y supervisió la post-producción. Whedon remontó el corte inicial de Snyder, rodó nuevas escenas y diálogos adicionales, eliminó del montaje original muchas de las escenas rodadas por Snyder, cambió el tono general del film, eliminando los elementos más oscuros e introduciendo notas de humor, inclusó llegó a cambiar el desarrollo de algunos persnajes e introducir otras sub-tramas no previstas por Snyder. Whedon es además el responsable de un cambio estilistico notorio, al eliminar la paleta de colores frios de Snyder, donde predominaban los grises y azules, por otra más cálida, con predominio de los tonos rojizos y ocres.
El film, estrenado finalmente en el 2017, no satisfizo ni a espectadores ni a críticos. El resultado, en mi opición, es una especie de monstruo de Frankenstein en el que se intenta reconciliar, sin conseguirlo, los estilos y sensibilidades de dos directores de personalidades tan opuestas como Zack Snyder y Joss Whedon. Snyder, obviamente, apostó por el continuismo con sus dos films precedentes, "Man of Steel" y "Dawn of Justice", incidiendo en un tono marcadamente nihilista y una estética tenebrista y oscura. Pese a la evidente espectacularidad del film, Snyder, director de marcada personalidad, no dudó en introducir elementos de caracter filosófico y mitólogico en su visión del universo superheroico de Superman y Batman. Aunque estos films funcionaron relativamente bien en taquilla, ambos películas se saldaron con una tíbia acogida comercial, pero sobretodo con un berrinche de buena parte del fandom que no perdonaron el sello autoral que trató de imprimir Snyder, sello que se hizo patente en su re-interpretación del caracter de los personajes más icónicos de DC Comics y en escenas tan controvertidas como aquella de Superman rompiéndole en cuello al general Zod.
Es obvio que Whedon fué contratado con la intención de alejarse de eso tono oscurantista y acercar lo más posible "Justice League" al tono (y a la taquilla) de un film más luminoso como "Avengers". Pienso que Whedon era muy consciente de para qué le contrataban y obró en consecuencia, pero la taquilla y (nuevamente) la crítica le dió la espalda, saldándose su estreno con un sonoro frácaso.
Snyder comentó entonces decepcionado que solo un cuarto de lo que él había rodado se había visto en el montaje estrenado en salas comerciales, y desde ese momento un grupo de fans vociferantes se reunió en las redes sociales bajo el hastag "#releasethesnydercut" para reclamar que se estrenase finalmente ese montaje original de 4 horas previsto por el director inicialmente contratado par el proyecto. Pues bien, lo han conseguido, y finalmente veremos ese montaje concebido por Zack Snyder. Si será mejor o peor que la versión estrenada en cines no lo podremos valorar hasta que se haya estrenado en HBO Max, sea en el formato que sea.
Llegados a este punto hay algo que me gustaría analizar: ¿porqué se estrena ahora ese montaje del director después de que los directivos de Warner habían anunciado a bomobo y platillo que no lo iban a hacer? Para mí la respuesta más obvia es que los productores mhan visto la viabilidad comercial de esta nueva versión del director. Sin embargo hay que tener muy presente que éste se estrenará como respuesta a las demandas de un grupo de fans ruidosos que han hecho valer su voz en las redes sociales.
No quiero que se me malinterprete. Por lo general soy bastante fan de las "versiones extendidas" y "montajes del director". Son muchos los casos en que un director no puede estrenar un film como él querría, debido a las injerencias de los productores o a las propias demandas de los exhibidores que piden montajes que sean comercialmente viables. Los lanzamientos domesticos de muchas películas nos han permitido tener acceso a esos otros montajes extendidos que no regalan (a veces) una versión más completa o más cercana a las intenciones originales del director que estuvo a cargo de la filmación. A veces. También es cierto que hay montajes del director absurdamente alargados y que poco aportan a la versión orginal ("King Kong" de Peter Jackson, o su trilogía de "El Hobbit", sin ir más lejos). En el caso concreto de "Justice League", dejando a un lado las demandas del grupo "releasethesnydercut", siento curiosidad por ver cómo iba a ser el montaje incialmente previsto, y además defiendo la demanda de un director que que vió su trabajo alterado por la injerecia de unos productores que querían ir por un camino radicalmente distinto y de un director que no compartía ni su visión ni su sensibilidad.
¿Y cuando empezó toda esta historia de dar salida a los montajes del director"? Sin duda con el estreno de la versión del director de "Blade Runner". Estrenada 1982 el film de Ridley Scott recibió una tíbia acogida por parte de la crítica, pero no tardó en convertirse en un film de culto y ser aclamada con el tiempo como una obra maestra. Scott, sin embargo, siempre mostró su disconformidad con la versión estrenada en las salas comerciales, a la que le habían hecho algunos retoques que nunca fueron de us agrado. En 1992 Scott tuvo la oportunidad de estrenar en cines su "director's cut", que incorporaba varios cambios importantes: se eliminó la voz en off, se eliminó el final feliz y se recuperó la escena del sueño del unicornio. Tengo que decir que la versión del director me parece de largo muy superior a la original: la voz en off siempre me resultó redundante y en exceso explicativa, restando al film buena parte de su misterio; la escena onírica del unicornio es crucial en el sentido que nos obliga a cuestionarnos el origen y la naturaleza del personaje de Rick Deckard; y el final feliz, en el que se utilizaron descartes rodados por Stanley Kubrick para "El resplandor", además de estéticamente incongruente, siempre me resultó una concesión facilona a la audiencia. El estreno de esta nueva versión en cines consechó una considerable taquilla y animó al propio Scott a revisar otras de sus películas ("Gladiator", "El reino de los cielos", "Alien" y, especialmente, "Legend"). ¿Oportunismo comercial? Puede. Pero aún así esas versiones extendidas nos han permitido rescatar escanes importantes que nunca debieron acabar en el suelo de la sala de montaje, y, al menos en los casos que cito, y en mi modesta opinión, estas versiones extendidas mejoran las originales. Scott llegó incluso a sacar una versión remasterizada del director's cut de "Blade Runner" con el nombre de "Final cut" y en la que se recuperó una escena perdida y se corrigieron algunos efectos especiales.
El fenómeno de las versiones extendidas adquiriría "carta de nobleza" con las nuevas ediciones de "El señor de los anillos". Aunque ya de por sí las versiones estrenadas comercialmente eran considerablemente largas, Peter Jackson se vió obligado a dejar fuera del montaje final muchas escenas cruciales para reducir el metraje final y favorecer la exhibición comercial de los films. Particularmente sensible es la versión extendida de "La comunidad del anillo", que creo que enriquece mucho el montaje incial rescatando excenas que nunca debieron haberse eliminado y que facilitan y amplian la comprensión del film. El lanzamiento comercial de dicha versión fué todo un éxito, pero eso también tuvo un poco deseado efecto secundario: Jackson ya montó sus films posteriores con la idea de dejar expresamente fuera del montaje escenas que recuperaría a posteriori. Por un lado algunos de esos montajes comerciales adolecían de cierta incoherencia al dejar fuera algunas escenas cruciales (notable en el caso de "El retorno del rey"), pero además se notaba a la legua la descarada maniobra comercial que suponía el estrenar en formato domestico 2 veces un mismo film, ofreciendo en ocasiones más "paja" que no aportaba nada, argumentalmente hablando, al montaje original (como en el caso de las ya citadas "King Kong" y las tres entregas de "El Hobbit").
Sea como fuere, desde entonces han proliferado los "director's cut", "extended versions", "final cut", etc., etc., etc. El propio Zack Snyder sacó al mercado un "Ultimate Cut" de "Watchmen" que, esta vez sí, supera con creces la versión estrenada comercialmente, al recuperar muchas escenas que se quedaron fuera en el primer corte e incorporar en la narración los "Relatos del navío negro", acercandose mucho más a la visión original de la obra maestra de Alan Moore.
Más arriba de este extenso post preguntaba ¿porque se estrena ahora el "Snyder's cut" de "Justice League"? Mi primera respuesta es que existe la posibilidad de darle una nueva salida comercial a un film que fué un fracaso en taquilla. Y defendía este nuevo release porque creo que es la manera de respetar las intenciones originales del director que fué inicialmente contratado para dirigirlo. Ahora bien, no es menos cierto que esta propuesta de Warner llega como respuesta a la demanda insistente de un grupo de fans vociferantes que se han movido a través de las redes sociales. Y me pregunto yo, ¿realmente hay que hacerle caso a los fans? "#releasethesnydercut" no se ha quedado solo, y el anuncio de este estreno a levantado también la demanda de que se libere el "Ayer's cut" de "Suicide Squad", y de manera más absurda a dado pié a un grupo de fans que piden ahora que se libere el supuesto montaje de 4 horas de "La venganza de los Sith", dando como argumento que la película pertenece al fandom y que hay que satisfacer la demanda de los mismos. ¿Si? ¿Hay que satisfacer siempre el fandom? ¿Hay que editar y montar un film en función de la opinción de lo que en el fondo es solo un pequeño aunque a veces muy ruidoso grupo dentro el público potencial de una película? ¿Dónde queda púes es sello de autor del director o guionista? ¿Dónde queda pués el trabajo del productor que marca las líneas maestras de todo el equipo implicado en una película? Incluso, rizando el rizo, ¿dónde queda entonces la opinión del grupo de espectadores que no forma parte de esas corriente de opinión? El fandom no forma parte del proceso creativo de un film, pero si que se siente "dueño" del mismo cuando se trata o obras populares que arrastran legiones de admiradores o seguidores, sean libros como "El señor de los anillos" o "Harry Potter", comics como "Superman", "Spiderman" o "Vengadores" u otras obras de similar calado.
En cuanto a estas demanas concretas, y el relación particular al film de George Lucas, conviene recordar que Zack Snyder se apeó de la producción de "Justice League" (o fué despedido) sin poder participar el montaje final de su film, que fué regrabado, remontado y reeditado sin seguir ninguna de sus instrucciones. George Lucas ofreció el montaje final de "La venganza de los Sith" tal como él quería que se viese en los cines. Y aún así se podría discutir sobre la conveniencia de re-montar y re-estrenar un film que ya tuvo su recorrido (bueno o malo) en taquilla, sobretodo cuando esa propuesta es la respuesta a, insisto, un grupo minoritario.
Aquí quiero recuperar un texto que no es mío, sino de Josep Parera, y que reza: "El problema es que, en los tiempos que vivimos, dejamos que las masas, sin conocimiento específico de nada, sin formación profesional alguna con respecto al tema tratado, tengan poder de decisión" (podéis leer el artículo completo aquí). Yo querría matizar el comentario del señor Parera: TODO el mundo, independientemente de su formación, cultura o conocimiento, tiene derecho a expresar su opinión. Actualmente Internet y las redes sociales facilitan que la gente se exprese con total libertad. El problema es cuando esas opiniones vienen desde la visceralidad, sin informarse previamente, sin analizarlo en detalle, sin contrastar las fuentes, sin leer otras opiniones o comentarios. Y muchas veces vienen desde la arrogancia, adoptando la postura de "yo tengo razón y tú no". No podemos evitar (ni creo que debamos) que esas opiniones se hagan públicas, pero creo que sí podemos (y debemos) leerlas con sentido crítico.
En este punto podríamos abrir un debate interesante: ¿a quién pertenece realmente una película? En Europa fundamentalmente se tiene una conceptción autoral y se defiende que el film pertenece siempre a su director; en USA, sin embargo, se le otorga dicha paternidad al productor, que es quién elige al equipo creativo que participará en el film y al director encargado de llevar a buen puerto dicha empresa, siempre bajo el respeto a unas líneas maestras marcadas por dicho productor, y con un mayor o menor margen de libertad creativa y capacidad de decisión. ¿Es más valida una postura que otra? No. La participación de un productor en el proceso creativo de un film, o de un editor en la concepción de un libro o un comic, no siempre ha dado lugar a malas decisiones. Cuando Jim Shooter, por ejemplo, obligo a Chris Claremont y John Byrne a rehacer el final originalmente previsto para la "Saga de Fénix Oscura", dió como resultado una los episodios más recordados por los lectores de X-Men y algunas de las mejores líneas de diálogo escritas por Claremont.
Conclusión: siento franca curiosidad por ver lo que originalmente Zack Snyder tenía intención de mostrar en "Justice League", pero también siento preocupación porque cada vez se le haga más caso a las corrientes de opinión que pululan cada vez con más frecuencia en las redes sociales (bloggeros, twiteros, youtubers, páginas como rottentomatoes, etc.) y que todo ello esté matando la libertad creativa de la gente que hace cine.
(Por cierto, si quereis releer mi anterior "diatriba" sobre mitos y superhéroes en la que comentaba, entre otras, las anteriores películas de Zack Snyder, la podéis leer aquí)






