Para mí este 2019 ha supuesto un punto de inflexión en cuanto a la forma de hacer y ver cine, y ese cambio viene impulsado por las plataformas PPV como Netflix, HBO o Amazon Prime. Estas plataformas ya no se limitan a producir series para televisión, sino largometrajes, CINE (en mayúsculas), por mucho que muchos se empeñen en continuar tildándolos peyorativamente de telefilms. "Roma" de Alfonso Cuaron es CINE, como también lo es "El irlandés" de Scorsese o "Historia de un matrimonio" de Noah Baumbach. Nos guste o no las viejas fórmulas segun las cuales una película debía estrenarse primero en salas comerciales caerán en desuso, y será el consumidor el que finalmenten decida cómo y cuándo desea consumir un largometraje, serie de televisión o cualquier otro espectáculo. Los tiempos cambian y debemos adaptarnos a ellos. Sí, es triste escuchar las cada vez más numerosas noticias referidas al cierre de salas de exhibición cinematográfica. Y la comodidad de ver un film en el salón de nuestra casa no podrá sustituir nunca a la magia cuasi-ceremonial que supone acudir a un cine y ver un largometraje en pantalla grande, pese a las colas y el ruido de palomitas masticadas. Pero no podemos luchar contra el cambio. ¿O sí?
En terminos estrictamente cinematográficos este 2019 nos ha traído un poco de todo Mucho buen cine y también alguna que otra decepción. La insípida y poco imaginativa "Star Wars: El ascenso de Skywalker" confirma que nunca debieron dejar la franquicia en manos de J. J. Abrams (tampoco en las de Ryan Johnson), mientras que Stephen King parace vivir un estimulante reivival cinematográfico (y televiso) gracias a la muy buena aceptación de "IT: capítulo 2", "Cementerio de animales" o "Doctor sueño". Y los superhéroes, especialmente los de Marvel, continúan teniendo mucho tirón en taquilla, como ha podido constatar el fenómeno "Vengadores: Endgame", film entretenido pero, en mi opinión, sobrevaloradísimo se mire como se mire.
¿Y qué films son los que yo destacaría como lo mejorcito de este 2019? Como siempre digo, no deja de ser una lista muy personal, así que cada cual se sienta libre de discutirmela, pero, en cualquier caso, ahí va mi propuesta:
- "Border" de Abi Abbasi, por su originalísima propuesta, y por su valiente discurso sobre la diferencia y la aceptación;
- "Ad Astra" de James Gray, por ser un hábil cruce entre "Apocalipse Now" y "2001", y porque su reflexión en clave humanista se contrapone al discurso teológico del film de Kubrick;
- "Nosotros" de Jordan Peele, por su malicioso sentido del humor, por su agilidad narrativa y porque Peele continúa demostrando que terror y reflexión social pueden ir de la mano;
- "La favorita" de Yorgos Lanthimos, por su cruel sentido del humor, por su refinamiento, tanto estético como narrativo, y porque esconde un discurso radicalmente femenino, que no necesariamente feminista;
- "Joker" de Todd Phillips, porque su completo y complejo estudio de un personaje en clave psicológica, porque habla de anarquía, nihilismo y lucha de clases, y porque NO es otra maldita película de superhérores;
- "El irlandes" de Martin Scorsese, porque que es rica e inabarcable, porque demuestra que también se puede hacer CINE en televisión, y porque es una versión proletaria de "El padrino" de Francis Ford Coppola; si esta última era operística, "El irlandes" en el clave de blues;
- "Dolor y gloria" de Pedro Almodovar, por su intimista reflexión sobre el paso del tiempo y la necesidad creadora, y porque solo por su plano final, uno de los más bellos que he visto en mucho tiempo, ya merece estar en esta lista;
- "Historia de un matrimonio" de Noah Baumbach, porque tiene uno de los guiones mejor escritos de este año, porque sus diálogos son brillantes y sus interpretaciones prodigiosas, por que es desgarradora, emotiva y sincera, y porque nos muestra una disección de un matrimonio en proceso de divorcio desde la justa equidistancia;
- "Parásitos" de Bong Joon-ho, por su habil mezcla de géneros (thriller, comedia negra, reflexión social...), y porque nos habla (también) de lucha de clases y desigualdad social sin dejar de ser nunca un film entretenidísimo;
- "La casa de Jack" de Lars von Trier, por su provocación, su desvergüenza y su malintencionada capacidad para molestar, y porque bajo su apariencia malrollera e irritante, esconde un interesantísimo discurso sobre la creación artística y la libertad creativa.
¿El actor del año? En este 2019 ha habido un buén número de interpretaciones masculidas destacadas, y a mí me resulta muy difícil quedarme con solo una. Mencionaré cuatro, para mí las mejores del 2019: Joaquin Phoenix en "Joker"; su interpretación en el film de Todd Phillips es simplemente de otro planeta. Christian Bale en "Le Mans 66"; el suyo es un trabajo rico y lleno de matices, Bale interpreta con el cuerpo, con la mirada, con la entonación, con el gesto... Adam Driver en "Historia de un matrimonio", su interpretación es absolutamente desgarradora y respira sinceridad y emoción por los cuatro costados, desde la primera entrevista con el abogado, pasando por la brutal escena de la pelea con su mujer o el momento en que canta el "Being Alive" de Sondheim. Lonardo Dicaprio en "Erase una vez en Hollyood"; su trabajo exige continúos cambios de registro, y DiCaprio los aborna con pasmosa naturalidad; no hay más que ver la escena en que está interpretando a su vez otra escena dentro de una filmación.
¿El compositor del año? Viniendo de mí puede parecer tópico y previsible que vuelva a mencionar al compositor francés Alexandre Desplat, pero que en un mismo año nos regale tres trabajos magistrales como "Adults in the room", "J'accuse" y "Mujercitas" ya le dan un puesto de honor entre los mejores del 2019.
¿La canción? Vale, reconozco que el "Into the Unknown" de "Frozen II" es un temazo. Pero a mí me pueden todas las canciones del último film (precioso) de Makoto Shinkai "Tenki no ko" (Traducido como "Weathering with you" en inglés y como "El tiempo contigo" en castellano), compuestas e interpretadas todas por el grupo de J-pop RADWIMPS. Os pongo el enlace de una de ellas, "Grand Scape", con la voz de Toko Miura
Introduciéndo un pequeño off-topic no quiero dejar pasar la oportunidad de hablar de algunas de las series de este 2019, porque desde hace algunos años, las producciones televisivas serializas están demostrando que no tienen nada que envidiar, tanto en ternimos de diseño y producción como en riesgo formal o narrativo, a cualquier producción concebida para la pantalla grande. Propuestas ha habido muchas y es dificil abarcarlas todas. No he podido ver la tercera temporada de "True Detective" y aún no he acabado de ver "Euphoria" o "The Terror: Infamy" para poder valorarlas justamente. Si diré que "The Walking Dead" hace tiempo que funciona por pura inercia y que lo único destacable de esta última temporada es la interpretación de Samantha Northon. "Juego de tronos" a finalizado su andadura televisiva no exenta de polémica, con una última temporada con un nivel de producción altísimo pero lastrada por unos guiones precipidados fruto del recorte en la cantidad de episodios, atesorando momentos sublimes con otros un tanto vergonzantes, y con un final agridulce que ha irritado a casi todos los fans pero que a mí, persoalmente, me ha gustado bastante. "Strangers things" mantiene sus altas cuotas de encanto ochentero en su tercera temporada, "El cuento de la criada" ha sabido reconducir su trama con giros interesantes sin caer en el bucle de la repetición, "Love, Death & Robots" sorprede más por su apabullante despliegue técnico que por sus propuestas argumentales, "The Mandalorian" tiene todo el encanto que le falta a la última saga de J. J. Abrams, "His Dark Materials" supera con creces a la mediocre adaptación cinematográfica de "La brújula dorada", "Cristal oscuro: La era de la resistencia" atrae por lo anacrónico de su propuesta con marionetas, "The End of the F***ing World" es una más que digna sucesora de su primera temporada, "The Boys" convence por su enfoque gamberro y satírico, y "Fose/Verdon" es un biopic interesantísimo alejado de la anédota morbosa para centrarse en el retrato certero de los personajes.
Al margen de éstas (y de muchas otras), ¿Cuáles destacaría yo como las mejores series del 2019? Cito cinco:
- "Chernobyl", por su atmosfera asfixiante, por su crudeza exenta de morbo y porque expone una verdad que muchos prefieren ignorar;
- "Así nos ven", dirigida en todos sus episodios por Ana du Vernay, por la manera tan sútil y hábil en como juega con las emociones de los expectadores, y por su contundencia a la hora de exponer uno de los más vengonzosos errores de la justicia estadounidense;
- "Good omens", precisa y ajustada adptación de la obra de Terry Pratchet y Neal Gaiman, porque es original divertida y por que tiene a unos David Tennant y Michael Sheen en estado de gracia;
- "Watchmen", escrita por David Lindelof e inspirada en el multipremiado cómic de Alan Moore y Dave Gibbons, por su valentía a la hora de cojer un material que muchos consideran intocable y construir un discurso original y novedoso sin miedo a las iras del fandom;
- "Mindhunter", producida por David Fincher, porque los episodios dirigidos por éste último son un prodigio de sofisticación y elegancia formal, porque ha sabido ampliar las propuestas de la primera temporada y porque ha sabido mantener su capacidad de fascinación.
- Peter Fonda, hijo de Henry Fonda y hermano de Jaen Fonda, inolvidable protagonista de "Easy Rider".
- Rutger Hauer, el replicante nexus-6 más destacado de la historia del cine, pero también inolvidable en films como "Eric, oficial de la reina", "Lady Halcón" o "Los señores del acero".
- Albert Finney, recordado por sus magistrales interpretaciones en films como "Tom Jones", "2 en la carretera", "Asesinato en el Orient Express", "Muchas gracias, Mr. Scrooge", "Bajo el volcán", "Muerte entre las flores", "Erin Brockovich", "Big Fish"...
- Doris Day, la eterna novia de américa en los años 60, ideal en comedias románticas como "No os comáis las margaritas", "Confidencias a medianoche", "Pijama para dos" o "No me mandes flores", aunque algunos siempre preferiremos recordarla en su papel de "El hombre que sabía demasiado" de Alfred Hitchcock, cantando del famoso "Qué será, será".












